El hombre como ser libre
El hombre como ser libre La existencia humana, según los defensores de la presente idea, solo es posible en la medida en que se dé la total libertad de elección, la más absoluta responsabilidad moral ante los propios actos y la completa claridad de que el hombre es un autor con una misión. Expliquemos: ante el mundo físico mecánico, el ser humano es el único capaz de actuar según su propia voluntad. En esta acción, el mundo simplemente será el piso sobre el cual se llevara a cabo. El mundo se limita a repetirse a sí mismo como una máquina y sin sentido y sin valor intrínseco alguno. Por ello el mundo no influye ni predispone la acción del hombre. Así, el es enteramente libre. Como aquella total libertad de elección y de acción del hombre, presupone que no existe ningún condicionante, entonces el ser humano es el absoluto responsable moral de cada uno de sus actos.